Amigos que pasan y dejan su huella aqui. Gracias por estar .Paz a tu corazon

Recuerda amigo cuando entras a la Casa de Dios pisas Tierra Sagrada.

La Casa de Dios es el lugar más Santo de todo el universo. Cada vez que entres ,recuerda que allí ,vive Jesús en el Sagrario y te espera con AMOR.

Vístete decorosamente, apaga tu celular y ten fe que todo lo que pidas, si eres respetuoso , piadoso en tus actitudes y posturas en el Templo, sera recibido por el Señor con agrado .

Y tu alma ya no será la misma.

Haz silencio. Busca cerrar tus ojos y quédate quieto. Dios esta en su Casa. El Amor puede hablarte íntimamente .

Mi deseo es que Dios se manifieste en ti.


Cristo Resucito, DIOS VIVE ENTRE NOSOTROS

domingo, 23 de agosto de 2009

Thomas Merton. Compartiremos aqui sus pensamientos.


Monje trapense, poeta y escritor sobre espiritualidad cristiana y monástica, que, a lo largo de su vida, se interesó por temas de mística y otras tradiciones religiosas, defendió el compromiso social y político del monje contemplativo y se relacionó, mediante una prolija correspondencia con pensadores y autores espirituales de su tiempo (1915-1968)

Que claridad en el alma en esta respuesta:

“Si quieres saber quién soy yo,
no me preguntes dónde vivo,
o lo que me gusta comer, o cómo me peino;
pregúntame, más bien, por lo que vivo,
detalladamente,
y pregúntame
si lo que pienso
es dedicarme a vivir plenamente
aquello para lo que quiero vivir.
A partir de estas dos respuestas,
puedes determinar la identidad de cualquier persona”
New York 1975 Tomas Merton

10 comentarios:

  1. “La santidad presupone no sólo una inteligencia humana normal, adecuadamente desarrollada y formada mediante una educación cristiana, una voluntad humana normal, una libertad adiestrada capaz de auto entrega y oblación, sino que incluso, y antes que todo eso, presupone unas emociones humanas sanas y ordenadas. La gracia supone y perfecciona la naturaleza, no reprimiendo el instinto, sino sanándolo y elevándolo a un nivel espiritual. Siempre tiene que haber en la vida cristiana un lugar adecuado para la espontaneidad saludable e instintiva”.[1]

    El santo no es el que impone un control violento sobre sus emociones, sino el que deja que la gracia las ponga al servicio de la caridad.

    “El verdadero santo no es aquel que se ha convencido de que es santo, sino el que está anonadado por el convencimiento de que Dios, y sólo Dios, es santo. Está tan sobrecogido por la realidad de la santidad divina, que comienza a verla por todas partes. Acaso pueda verla también en sí mismo, pero ello será probablemente en último lugar, porque en sí mismo seguirá experimentando la nulidad, la pseudo realidad del egoísmo y del pecado. Con todo, aun en la negrura de nuestra disposición al mal brillan la presencia y la misericordia del divino Salvador”.[2]
    El santo no se busca a sí mismo, busca a Dios y su gloria, y para eso trata de ser instrumento dócil en sus manos, dejando pasar a través de su vida, la misericordia de Dios.
    [1] Vida y Santidad, 36.
    [2] Vida y Santidad, 37.

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  2. Nuestro servicio a Dios y a la Iglesia no consiste sólo en hablar y hacer, sino también en períodos de silencio, en los que escuchamos y esperamos. Quizá sea muy importante, en nuestra época de violencia e intranquilidad, redescubrir la meditación, el rezo intuitivo, íntimo y silencioso, el silencio creativo cristiano".
    (Thomas Merton, Amar y Vivir).

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  3. Ser parte de todo...
    ¡Oh Dios! Somos uno contigo. Tú nos has hecho uno contigo. Tú nos has enseñado que si permanecemos abiertos unos a otros Tú moras en nosotros. Ayúdanos a mantener esta apertura y a luchar por ella con todo nuestro corazón. Ayúdanos a comprender que no puede haber entendimiento mutuo si hay rechazo. ¡Oh Dios! Aceptándonos unos a otros de todo corazón, plenamente, totalmente, te aceptamos a Ti y te damos gracias, te adoramos y te amamos con todo nuestro ser, nuestro espíritu está enraizado en tu Espíritu. Llénanos, pues, de amor y únenos en el amor conforme seguimos nuestros propios caminos, unidos en este único Espíritu que te hace presente en el mundo, y que te hace testigo de la suprema realidad que es el amor. El amor vence siempre. El amor es victorioso. AMÉN.
    -Thomas Merton-

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  4. "Lo que es serio para los hombres a menudo no tiene importancia a los ojos de Dios.Lo que en Dios puede parecernos un juego es quizás lo que El toma más seriamente.Dios juega en el jardin de la creación, y, si dejamos de lado nuestras obsesionessobre lo que consideramos el significado de todo, podemos escuchar el llamado de Diosy seguirlo en su misteriosa Danza Cósmica.No tenemos que ir muy lejos para escuchar los ecos de esa danza.Cuando estamos solos en una noche estrellada; cuando por casualidad vemos a los pajaros que en otoño bajan sobre un bosque de nísperos para descansar y comer; cuando vemos a los niños en el momento en que son realmente niños; cuando conocemos al amor en nuestros corazones; o cuando, como el poeta japonés Basho, oímos a una vieja ranachapotear en una solitaria laguna; en esas ocasiones, el despertar, la inversiónde todos los valores, la "novedad", el vacío y la pureza de visión que los hace tan evidentes nos dan un eco de la danza cosmica.Porque el mundo y el tiempo son la danza del Señor en el vacío. El silencio de las esferas es la música de un festín de bodas. Mientras más insistimos en entender mal los fenómenos de la vida, más nos envolvemos en tristeza, absurdo y desesperación. Pero eso no importa, porque ninguna desesperación nuestra puede alterar la realidad de las cosas, o manchar la alegría de la danza cósmica que está siempre allí. Es más, estamos en medio de ella, y ella está en medio de nosotros, latiendo en nuestra propia sangre, lo queramos o no".
    Thomas Merton.

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  5. “El mundo fue creado por Dios y es bueno, y a menos que ese mundo sea nuestra madre, nosotros no podemos ser santos, porque no podemos ser santos si no empezamos siendo por encima de todo humanos”.
    Thomas Merton.

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  6. PAZ Y BIEN ! gracias por la informaciòn y la invitacion al blog, creo que son luces y vitaminas para nuestra santificaciòn !!,

    un abrazo, oraciones y Bendiciones,
    Vanessa

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  7. Qué alegría Adri que incluiste a Thomas Merton!!.
    Qué delicia es leerlo y saborear sus frases llenas de amor gracias al Espíritu Santo.

    Un abrazo en Cristo amado.

    >María

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  8. Hola Maria, VANESA que alegria verlas.
    Espero sugerencias

    un abrazo
    adri

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  9. ESTO ES AMOR....
    “Vuelo en alas del amor por toda la casa. Tengo la impresión de andar dos pasos por el suelo y cuatro por el aire. Esto es amor: Y es consuelo. No me preocupo si es consuelo. No estoy apegado a las consolaciones. Amo a Dios. El amor me lleva por todas partes. No quiero hacer nada más que amar. Y cuando suena la campana tengo que dominarme apretando los dientes, porque este amor, amor secreto, amor escondido y amor oscuro, bulle dentro de mí y fuera de mí, donde no me cuido de hablar sobre él. En todo caso carezco de tiempo y de fuerzas para tratar tales materias. Sólo me queda tiempo para la eternidad, es decir, para el amor, el amor, el amor.
    El amor me empuja por todo el monasterio, me hace moverme de un lado a otro, el amor es lo único que me permite seguir adelante. El amor, cuando comienza, lleva un paso tan rápido que hay que sujetarse bien para no caer. Cualquier ritmo de celeridad es demasiado lento para el amor; en tanto que ninguna velocidad es excesiva para uno cuando se deja arrastrar por el amor. Tras ello sólo queda bogar de continuo sobre su corriente.
    Esto me abrasa. Estoy completamente agostado por el deseo, y sólo acierto a pensar en una cosa: permanecer en el fuego que me quema”.

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  10. La escritura se convirtió para Merton en una disciplina espiritual, que le mantenía despierto, que lo empujaba cada vez más lejos, hacia una meta que se le anunciaba en el mismo proceso de escribir. Merton encontró a Dios en la escritura, y a través de ella maduró como monje. En septiembre de 1949 Merton escribió:


    “Me parece que escribir, lejos de ser un obstáculo para la perfección de mi vida espiritual, se ha convertido en una de las condiciones de las que dependerá mi perfección. Si he de llegar a ser santo, y no existe nada que más desee, me parece que tendré que conseguirlo escribiendo libros en un monasterio trapense. Si he de alcanzar la santidad, no debo limitarme a ser un monje, que es lo que todos los monjes tienen que hacer para llegar a ser santos, sino además debo reflejar en el papel aquello en lo que me he convertido. La cosa puede parecer sencilla, pero no es una vocación fácil” .

    (Dice Merton que se trata de ser un buen monje, ser él mismo, y escribir sobre ello; “ser una completa y santa transparencia: vivir, orar y escribir, a la luz del Espíritu Santo, desapareciendo yo enteramente para convertirme en propiedad pública, del mismo modo que Jesús es propiedad pública en la misa”. SJ, 266; SJ, 183).


    La obra escrita de TM es abundante, casi 70 libros, y aun no está íntegramente traducida al español; aquí damos un listado breve de sus libros más importantes y el año de publicación: La montaña de los siete círculos (1948), Semillas de contemplación (1949), Ascenso a la verdad (1951), El signo de Jonás (1953), Los hombres no son islas (1955), Pensamientos en la soledad (1958), Cuestiones disputadas; La sabiduría del desierto (1960), Vida y santidad (1963), El camino de Chuang Tzu (1965), Incursiones en lo indecible; Conjeturas de un espectador culpable (1966), Místicos y maestros zen (1967) y El zen y los pájaros del deseo (1968).
    extraida del blog Los Amigos de Tomas Merton

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Querido hermano en Cristo espero tus palabras. Entre todos nos unimos en comunion de oracion.
Un abrazo

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Aqui estoy solo para Glorificar a Dios y hacerlo Amar.